Hasta ahora, mi actuación, y la del movimiento RI (Revolución Integral) en su conjunto, ha sido de difusión escueta, confusa y dispersa de sus ideas básicas. Estaban, además, los Encuentros RI, seis hasta el momento, que eran débiles y confusos en sus contenidos, y que carecían casi por completo de continuidad en los meses posteriores. No había una estrategia. No había una estructura organizativa.
La inexistencia de un Programa de la RI fue determinante de ello. Al no tenerlo, fallaba todo lo demás, o era irrealizable.
El toque de atención, el estímulo, resultó ser la movilización popular contra la política sanitaria gubernamental en 2020-2022. Fue una gran oportunidad perdida para la RI, al prevalecer finalmente fuerzas afines al sistema, disidencia controlada. Entonces se evidenció lo mucho que podemos alcanzar, potencialmente, así como nuestras carencias y defectos, los mías y los del movimiento RI.
La conclusión fue que había que tener un ideario, un programa, una estrategia, todo ello unificado y sintetizado.
Es necesario, además, organizar la acción transformadora, pues no basta con tener razón. La RI nunca ha poseído una estructura organizativa, de manera que a quienes deseaban colaborar regularmente no se les ofrecía el marco ni la manera de hacerlo. El movimiento RI debe organizarse en equipos de trabajo, a diversos niveles. Es necesario un Equipo Primero Provisional, que impulse todo ello. El conjunto debe dotarse de un Reglamento, según en los principios de la democracia directa.
El objetivo estratégico es hacer del movimiento RI una fuerza presente, activa, organizada y en expansión, capaz de influir significativamente en la opinión pública, esto es, en los sectores avanzados de nuestra sociedad.
El paso previo es tener un Manifiesto, o texto sintético, y un Manual, o manifiesto extenso, en el que estoy trabajando. Esto hoy no lo tiene nadie[1], y por sí mismo nos otorgará una fuerza enorme.
Editado el Manual, hay que estudiarlo y debatirlo. Hacerlo individual y además colectivamente, lo que es un paso hacia la expansión asociativa del movimiento RI, que necesita tener una organización y extenderse.
Así, cualquier persona que quiera no sólo conocer nuestras ideas sino además colaborar y participar en la acción transformadora le vamos a ofrecer una relación regular con el movimiento RI, un espacio para estudiar, formarse, debatir, organizarse, comunicar, influir en la opinión pública, criticar a la disidencia controlada, practicar el activismo y movilizar.
En unos dos años a partir de la elaboración del Manual, el programa e ideario de la Revolución integral tiene que haberse dado a conocer a toda la sociedad. Ello lleva implícito la idea de la crítica a las corrientes e ideas opuestas. Ahora son conocidas -muy deficientemente- sólo partes del programa RI, aisladas y confusas, en el marco de una gran ambigüedad, conciliación y desconcierto, donde apenas nada está delimitado, por falta de crítica y debate.
Los asuntos importantes en cada coyuntura deben servir para realizar intervenciones públicas, lo que, cuando se den las condiciones apropiadas, tiene que ampliarse hasta la acción movilizadora en la calle. Esto exige, como precondición, realizar un análisis de la situación, en el país y en el mundo.
Los instrumentos ya existentes de comunicación, la web RI y la revista digital han de repensarse conforme a los objetivos establecidos arriba. Lo mismo las webs particulares, comenzando por la mía.
ANEXO. – Los días 25-26-27 de agosto de 2023 tendrá lugar el Séptimo Encuentro RI. Información e inscribirse en 7encuentroRI@gmail.com
[1] Los grupos en acción suelen copiar ahora el programa de Vox (o el del partido republicano yanqui), del mismo modo que hace unos años copiaban el programa de Podemos. Todos son ajenos a la idea de revolución, todos quieren operar dentro del sistema, todos sueñan con recibir dinero del poder constituido.