Ante la masiva llegada de emigrantes a Canarias es necesario elevar la voz contra la emigración como fenómeno indeseable propio del sistema de dominación actual, estatal y capitalista.
1) El pueblo canario, hoy oprimido por el Estado español, aspira a la libertad, la soberanía, la recuperación integral de su cultura e idiosincrasia y la independencia. Una parte de esa soberanía que se propone reconquistar consiste en decidir él mismo, no Madrid ni Bruselas, quien accede y quien no accede a su territorio, a la casa ancestral de los canarios, antaño guanches, que fueron invadidos por la corona de Castilla en el siglo XV, por lo que desde entonces son comunidad oprimida y sin libertad. Los ahora llegados desde África, sin haber demandado al pueblo canario permiso para acceder, pisotean y violan la soberanía de éste, mucho más porque llegan llamados, es más, llevados, por el Estado español y por la Unión Europea, para culminar el genocidio canario y el genocidio europeo. Los africanos que ahora escarnecen y desprecian la soberanía de la nación canaria tienen que pedir perdón y marcharse. Son los nuevos invasores de Canarias.
2) Los buenistas españoles, hipócritas y desalmados agentes del poder constituido, aducen que los africanos llegados lo hacen “huyendo del hambre”, pero basta con ver en televisión a estas gentes para concluir que en nada aparentan el haber pasado hambre. Lo cierto es que son llevados, a veces con malas artes, a Canarias en primer lugar por su gobierno, por el Estado de Senegal, que recibe de la Unión Europea una sustanciosa prima por cada individuo que coloca en las Islas Canarias. Además, está la acción inductora, inmoral y malvada, de las embajadas españolas, de las oenegés, del clero católico obediente a ese personaje anticristiano y necio que es el papa actual, de los partidos políticos españoles, en particular ERC, Podemos y PSOE, de los agentes europeos dedicados a “la acción humanitaria” neocolonial en África, etc. Todos ellos forman la tropa repulsiva de los nuevos negreros, de los neonegreros. No podemos olvidar que la patronal española exige la llegada de 250.000 emigrantes cada año, mientras que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal del Estado español eleva la cifra a 300.000, a fin de que “nuestro” Estado recaude más fiscalmente, cantidades que los neonegreros se esfuerzan en conseguir año tras año.
3) Los buenistas “olvidan” que un procedimiento cada vez más utilizado para expulsar a la población africana de sus tierras y obligarla a emigrar a Europa (y a otros continentes) es el promover guerras y conflictos armados por doquier en África, así como impedir el desarrollo económico de esos países, para que efectúen una única actividad, ser granjas de crianza de seres humanos con destino a la exportación. Que todo esto sea monstruoso evidencia la catadura moral de los neonegreros. En efecto, para desalojar a la población africana se irán organizando más y más guerras en África, más y más hambrunas artificiales, etc. Tal es una de las consecuencias del sistema neonegrero de trata de neoesclavos propio del siglo XXI. Con todo ello el sufrimiento y las muertes de las gentes africanas ira creciendo…
4) Los poderes constituidos pretenden realizan la sustitución étnica en Canarias y en Europa, reemplazando a los pueblos hasta ahora allí existentes por una masa inmensa de gentes arribadas desde fuera, que es la forma más habitual de efectuar la limpieza racial. Por eso los “antirracistas” cacareantes son racistas antiblancos, que están trabajando para eliminar a los pueblos ancestrales, blancos, de estos territorios.
5) Un caso concreto de sustitución étnica y limpieza racial fue lo realizado por la corona de Castilla en Canarias, cuando el pueblo guanche fue suplantado paso a paso por emigrantes europeos, desde finales del siglo XV. Aquél primero fue puesto en minoría demográficamente y finalmente extinguido, desapareciendo definitivamente su lengua y cultura a finales del siglo XVII. Ahora los poderes constituidos desean hacer lo mismo, pero esta vez con emigrantes africanos en vez de con emigrantes europeos. Los entonces llegados desde Europa a Canarias realizaron el exterminio de la nación guanche, apoderándose de sus tierras, bienes y propiedades. Eso es exactamente el proyecto actual, que los africanos llegados arrinconen primero a los canarios, luego los exterminen y finalmente se queden con sus bienes. Esto no va a tardar en suceder casi dos siglos, como antaño, sino unos decenios, si el pueblo canario y los pueblos europeos no se ponen en pie contra esa forma espantosa de neocolonialismo, genocidio y racismo que es hoy la emigración.
6) Quienes abandonan sus países en África desoyen las voces de aquéllos que allí les piden que no emigren, que se queden, pues la emigración es una sangría demográfica y global para África, una catástrofe probablemente peor que la saca de esclavos negros para América efectuada al alimón por las oligarquías africanas negras y los navegantes europeos blancos en los siglos XVI-XIX. Ahora, los países africanos abundan en discursos, llamamientos, libros, pasquines, vídeos, mensajes de móvil, etc. pidiendo, implorando, a su juventud que no se vaya, que no emigre a Europa, que permanezca en su país para contribuir a resolver los muy graves problemas que allí existen. Es obvio que los llegados a Canarias y a otros destinos europeos no han seguido tan sabios consejos, no han querido escuchar a los suyos, han venido a Europa en pos del consumo, el dinero y el filibusterismo. Eso dice muy poco en su favor, pudiéndose afirmar que no son lo mejor de cada país. Arriban sin solicitar permiso, despreciando la soberanía de los pueblos europeos, y salen de sus países sin escuchar a la gente más sabia, honrada y moral de ellos y de toda África. Así pues, ¿qué respeto se merecen? Por cierto, sería muy bueno que tales exhortaciones a la juventud africana realizada por africanos para que NO EMIGRE A EUROPA, efectuados en todos los países africanos, fueran publicadas aquí, para que todos puedan medir la perfidia, hipocresía y vileza de los neonegreros europeos, progresistas, izquierdistas, humanitaristas, pacifistas, oenegeros, clericales y buenistas, así como la baja catadura moral y política de los emigrantes que nos llegan. Con estos tenemos que ponernos serios, severos, y decirles con claridad que no ha sido llamados por los pueblos europeos y que no pueden estar aquí. Que tienen que marcharse.
7) Dado que estamos a las puertas, si no ya dentro de ella, de una nueva guerra mundial, entre EEUU y la Unión Europea contra China y Rusia, la arribada de masas tan compactas de gentes satisface al militarismo fascistizante europeo, pues éste considera a los llegados como carne de cañón al servicio del imperialismo europeo, además de como mano de obra muy barata (2,5 euros la hora…). Así pues, en las condiciones actuales, la emigración africana masiva forma parte de los preparativos para una nueva guerra mundial.
8) La extrema derecha, los conspiracionistas y otros neonazis afirman estar “en contra” de la emigración, pero ¿lo están realmente o sólo mienten y engañan? Durante los años que Trump fue presidente de EEUU entraron en su país más emigrantes que nunca, pues ese sujeto decía una cosa, de manera vociferante, y hacia otra, a la chita callando. Ahora en Italia, con G. Meloni, mujer fascista y pistolera de presidenta del gobierno, la política ante la emigración es exactamente la misma que la de los gobiernos que la han precedido. Aquí, ese sucio montaje neofranquista llamado Vox, con un Mussolini de opereta, S. Abascal, al frente, afirma ser contrario a la emigración, pero advierte que sólo contra la “ilegal” … que es una parte mínima e insignificativa del total. La emigración resulta ser una necesidad económica primordial para el gran capitalismo actual, y es aún más necesaria para los entes estatales de todos los países desarrollados. Nadie que respalde a uno y a otro puede estar en serio, de verdad, contra la emigración. Lo que sucede es que dado que el descontento y clamor popular contra la emigración, el racismo antiblanco y la sustitución étnica han alcanzado ya un nivel notable y además creciente, las instancias del poder han ido poniendo en activo partidos por toda Europa que dicen estar “en contra” de ella, una forma de disidencia hiper controlada de naturaleza exclusivamente verbal, a fin de frenar la toma de conciencia popular, que va a ser el antecedente de grandes movilizaciones populares para que los poderes constituidos no sigan llenando Europa de inmigrantes. Es de necios muy necios esperar que, por ejemplo, Trump, haga algo consistente contra la emigración, cuando él mismo es un capitalista multimillonario que necesita a los emigrantes para explotarlos con salarios ínfimos. Su insultante opulencia depende en gran medida de ellos, así que está en la tarea de exterminar a “la basura blanca” de EEUU, a esos muchos millones de trabajadores de raza blanca que el Estado yanqui desea liquidar, y lo está haciendo ya, para ir creando una nueva mano de obra mucho más sumisa y obediente, de inmigrantes. Confiar en que Meloni tome medidas antiinmigración no es menos desatinado, pues ella es una fascista, una super-patriota en consecuencia, que cree obtusamente en el imperialismo italiano, en hacer poderoso y agresivo a su país, y para eso necesita de la emigración como mano de obra barata y carne de cañón. Creer en las promesas y en las palabras de los politicastros y politicastras, sin fijarse en las condiciones reales y en los hechos, es de pardillos.
9) Sólo la acción popular revolucionaria, con movilizaciones masivas cada vez que lleguen las oleadas de emigrantes promovidas desde el poder, puede frenar la aniquilación de los pueblos ancestrales europeos, de sus culturas y sus lenguas, de su patrimonio étnico y genético. Porque, en contra del criminal racismo antiblanco que nos acosa con fines exterminacionistas, hemos de sostener que nuestros genes son igual de buenos que los de los demás pueblos y continentes, igual, de modo que el autoodio que se nos inculca constantemente (colonialistas, racistas, etc.) es la maligna retórica del nuevo racismo. Esos genes han de permanecer, no desparecer. Porque el genocidio europeo tiene dos partes, una, impedir de muchas maneras que los pueblos europeos se reproduzcan, tengan hijos; dos, traer masivamente gentes de fuera, para primero dejar en minoría y luego aniquilar a los pueblos europeos.
10) Los africanos son para África, no para Europa[1], allí tienen que estar, con los suyos, levantando sus países, luchando por mejorarlos, combatiendo al imperialismo europeo y los otros imperialismos, que son los agentes causales primeros de la emigración, esto es, del expolio y el robo de la población africana. La tarea de los africanos conscientes, que aman a su tierra y a su gente, es hacer allí la revolución, no huir egoístamente a Europa, llamados y llevados por los reclutadores mafiosos de neoesclavos, los diversos Estados. Quienes en África denuncian y combaten el hecho migratorio son nuestros aliados, nuestros hermanos, con ellos tenemos que unirnos en un gran frente transcontinental Europa-África, para eliminar la actividad emigrante y derrocar a las maléficas fuerzas que la promueven aquí y allí.
11) El proyecto de la Unión Europea, para culminar, requiere de una sustitución étnica, pues los valores propios de lo mejor de la cultura europea, erudita y popular, no son apropiados para erigir el centralismo imperialista y belicista que es la Unión Europea, con su brutal capitalismo, dirigida por el imperialismo alemán, el peor de todos. Los pueblos de Europa tienen desde hace siglos unos valores diferentes a los Estados de Europa agrupados en la UE, por lo que el gobierno europeo desea hacer la sustitución étnica como modo de liquidar tales valores, según el principio de “muerto el perro se acabó la rabia”, que son causa permanente de disidencia, resistencia y oposición al despotismo totalitario de toda naturaleza. La cultura europea posee como ideales o valores fundantes los ocho siguientes: la libertad y las libertades, el autogobierno popular, la sociedad moral, la noción de persona soberana, la categoría de virtud cívica, el rechazo de la riqueza tanto como de los ricos, la cosmovisión del amor y el repudio de la actividad conquistadora militarista. Sobre ellos y con ellos, la UE no puede llegar a ser primera potencia mundial, que es lo que desean sus mentores. Así pues, se han propuesto traer de fuera gentes que no poseen esos valores, debido a avatares de su historia y presente que ahora no es posible exponer, lo que las hace dóciles, pasivas, justamente el tipo de personas que demanda la UE. Desde hace muchos siglos, quizá milenios, las sociedades africanas han padecido situaciones terribles a manos de sus muy perversas elites dominantes negras, superlativamente totalitarias, represivas, esclavistas y violentas, lo que ha constituido un tipo de cosmovisión que ahora le viene muy bien al imperialismo europeo. Por eso también, África tiene ante sí hoy una gran tarea, efectuar una revolución integral civilizadora que la convierta en espacio de la libertad, el bien moral y la virtud personal. Con ello resolverá una situación horrible, existente desde hace milenios. Pero si la meta de su juventud es venir a Europa como neoesclavos en vez de hacer la revolución allí, el problema no se resolverá, se irá agravando, de donde resultará la destrucción de África, que es el objetivo del buenismo europeo, tan santurrón, tan “humanitarista”, tan hipócrita, al estar subsidiado por el gran capital europeo y por los entes estatales mafiosos que dominan en Europa.
11) Hasta hace poco la oposición a la emigración era etiquetada violentísimamente de “racismo”, “xenofobia” y “delito de odio”, y quienes nos atrevíamos a explicar nuestros argumentos antirracistas sufríamos formas venenosas de descalificación, marginación, censura y linchamiento, a cargo de la izquierda fascista, la intelectualidad mercenaria, les neonegreros, la televisión capitalista, el feminazismo y los buenistas. Entonces el “antirracismo” pro emigración era una religión política en la que había que creer obligatoriamente. A mí me han perseguido también por esto durante bastante tiempo. Pero en los últimos años la situación ha dado un vuelco. Ahora, los defensores del hecho migratorio se reducen a una minoría institucional, que tiene todo el aparato de propaganda del poder a su servicio pero que está obviamente a sueldo del capitalismo europeo, lo que la desacredita, y la cosa ha llegado tan lejos por ese camino que a todo correr los poderes instituidos han tenido que fabricar partidos “antiinmigración” por toda Europa, para evitar que la situación se les fuera de las manos y se vieran enfrentados a un movimiento popular muy poderoso, hostil al genocidio europeo. Personas de un elevado nivel intelectual y un limpio compromiso político ya han levantado su voz contra el criminar hecho migratorio, como es el caso de Jose Mari Esparza Zabalegui, que en la prensa de Euskal Herria ha dicho unas cuantas verdades sobre esta materia al pueblo vasco. Esparza, el intelectual más enjundioso de la izquierda abertzale, ha comprendido que la emigración es sustitución étnica y limpieza racial, es racismo antiblanco, y que su objetivo último, para su pueblo, el vasco, es aniquilarlo, destruir su cultura y extinguir el euskera. Pero su ejemplo no ha sido seguido en Cataluña, donde dos partidos “independentistas” vendidos al Estado español y servilmente procapitalistas, ERC y la CUP, están embarcado es la vil tarea de destruir Cataluña de raíz, a través de la sustitución étnica que es el hecho migratorio masivo. Con ello, esas dos formaciones políticas culminan su habitual trayectoria anticatalana, contrarrevolucionaria, fascistoide y, simplemente, demente. Empero, ya están surgiendo voces críticas contra su sinrazón, maldad y servilismo, esperamos que pronto suenen fuerte, muy fuerte, en Cataluña.
12) ¿Qué hacer? Tenemos que ser conscientes de que en este asunto vamos ganando, que los genocidas están ya a la defensiva, que hoy ya no pueden exponer sus brutales argumentos pro inmigración con el descaro de antaño. Ahora tenemos que dar un paso más: ir convirtiendo la oposición popular al hecho migratorio en lucha, resistencia y movilización. Para ello, hemos de ser muy críticos con quienes dice y dicen, pero nada hacen ni dejan hacer, pues esa es la estrategia actual del sistema, que todo quede en palabrería. Nuestras tareas pueden ser:
* Difundir cada cual lo que le vaya llegando de crítico contra la emigración. Hacer charlas, tertulias, conferencias, textos, libros, videos, etc., de reprobación de lo emigratorio.
* Denunciar a los bocazas de la cosa, Vox, los fascismos, los neonazis, los conspiracionistas y demás timadores políticos. Rechazar absolutamente a los partidos políticos de extrema derecha “antiinmigración” que se han ido formando en Europa. Todos ellos son fuerzas pro-inmigración en las nuevas circunstancias, además de repulsivos fascismos.
* Elaborar un Registro de Racistas Antiblancos, Genocidas y Neonegreros que se actualice periódicamente, en el que figuren los agentes, personas e instituciones, del capitalismo-Estados que se requiere sean señalados y denunciados. Responder con el máximo de contundencia a estos canallas, en caso de que vuelvan a las andadas.
* Establecer lazos fraternales de camaradería y colaboración con las organizaciones y las personas africanas que están en contra de la emigración de la juventud de África a Europa, dando a conocer sus formulaciones, textos y videos aquí.
* Denunciar los subsidios y ayudas económicas que se otorga a los emigrantes, hasta forzar al Estado español a ser transparente en esto, publicando la lista completa de los beneficiados y la cuantía total. El objetivo es que cesen tales aportaciones, tales incentivos, tales sobornos, de los cuales está viniendo la ruina de África y la destrucción de Europa.
* Desmontar una y otra vez el tratamiento que las televisiones otorgan a la emigración, por totalmente oscurantistas y manipulador, pérfido y racista.
* Recusar la muy nefasta función de las oenegés, hasta lograr su desaparición, lo que debe ir precedido de su desprestigio.
*Denunciar a los empresarios por preferir la mano de obra emigrante a la nativa, señalando que eso es una de las muchas aciagas manifestaciones de la maldad del capitalismo, por la cual también necesitamos eliminar éste, sustituyéndolo por una economía comunal integral.
*Explicar a los emigrantes, sin paternalismo de raíz racista ni buenismo residual, que su sitio no está aquí, que se han equivocado, que tienen que retornar a su país, volver al lugar de donde proceden, a mejorarlo, a hacer allí la revolución. Hacerlo en sus lenguas, publicando textos y vídeos en ellas.
*Advertir a los memos e inmorales de aquí que la emigración no va a durar siempre, que África está agotando los recursos humanos que puede exportar, que fuera del África negra ya no existe excedente de población en ninguna parte[2], y que, si desean que su sociedad no se extinga y funcione mínimamente, tienen que tener hijos, fomentar la natalidad. Tener hijos como sea, en cualquier circunstancia, es decisivo para que Europa tenga futuro y no sea barrida. Por ello, las mujeres en edad fértil deben desoír al feminismo, criticarlo, desautorizarlo, como otro agente más del genocidio europeo y el racismo antiblanco.
* Cuando se den las condiciones, tenemos que crear una Unión de los Pueblos Ibéricos Contra la Emigración y el Genocidio, para que sea el organismo rector en lanzar campañas de movilización en la calle cuando los Estados europeos y sus agentes hagan penetrar cantidades colosales de personas en Europa, con huelgas, corte de carreteras, boicot, sabotaje, desobediencia civil y otras formas de lucha y activismo. Así mismo, hay que constituir un centro directivo a escala europea, un Comité contra la Emigración y el Genocidio Europeo y para la Salvación de los Pueblos de Europa.
En suma, vamos a pelear el asunto de todos los modos posibles, pues ahora ya, como he dicho antes, los neonegreros están a la defensiva. Este asunto va a ser una potente lanzadera del ideario y el programa de la revolución integral en los próximos años.
[1] En esta misma página hay otros textos míos contra la emigración, “África. Revolución, no emigración”, o “La gran patronal nos está exterminando”. En éste se pone de manifiesto la naturaleza etnicida, criminal y monstruosa del sistema capitalista contemporáneo. También pueden consultarse diversos videos sobre este asunto en mi canal de YouTube. Porque quien es pro capitalista es partidario de la emigración, del mismo modo que quien defiende la emigración es pro capitalista.
[2] Mi libro “Erótica creadora de vida. Propuestas ante la crisis demográfica” trata en profundidad esta cuestión.